NO FUE PUBLICIDAD, Dio compra SILENCIO

Los medios que recibieron publicidad por parte de la Alcaldía no promueven la campaña publicitaria de «La Basura Tiene Días». Esta campaña, programada para tres meses, parece haber comprado sus silencios.

Son muchos los medios, casi todos del otro lado del río, con programas estelares y millonarios, que cobran más de 100 mil pesos mensuales, ya sea a comunicadores en lo personal o a los medios. Además, parece que un conocido peledeísta del Comité Central logró que les «rociaran las manos».

Dio no ha logrado escaparse de la crítica. Aunque se intente comprar a todo el mundo, no se puede lograr. Para defenderle, cuenta con lo peor: fabricantes de noticias falsas, desprestigiados del periodismo, mercenarios sin bandera, lo que empeora la situación. Ya se sabe que «El Show del Mediodía» y «El Nuevo Diario» son sus «dos casas», por lo que todo lo que fluya de ahí es visto como bocinaje y no surte efectos positivos. Esto solo sirve para «ayudar» a ciertos miembros de la prensa.

Somos Pueblo, Nuria, Cavada, Alicia, los de RCC Media, la Z… hasta cuándo guardarán silencio frente al desmán y los seguros escándalos, desde la nómina de la Alcaldía hasta el Plan Chatarra, que apunta a ser un negocio sin control. Además, la contratación de furgones para crear vertederos y la violación de leyes medioambientales y de salud… parece que esa prensa cómplice espera un muerto.

Dio no entiende y está mal asesorado.
La prensa le vendrá encima, y esos mismos serán los primeros en criticarlo cuando se desate el festín de opositores y el dinero comience a fluir en su contra.

Llegarán nuevos denunciantes que expondrán, por encima de la prensa «nacional», los actos dolosos, y las redes sociales harán el resto. Esto elevará las cuotas, y Dio tendrá que buscar el dinero que no tiene para seguir comprando silencio, sin comprender que las redes ahora funcionan como un saco de papas, donde una papa dañada arruina a todas las demás.

Dio fracasa en la gestión, y mañana saldrán dos o tres periódicos diciendo que todo va bien, pero las fotos viralizadas del desastre en el que tiene sumida a la ciudad callarán a aquellos malditos que, por cuatro pesos, permiten que se asesine a un municipio.

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